El IES Cosaburum es un centro ubicado en Consuegra (Toledo) y cuenta con aproximadamente 800 alumnos repartidos entre sus enseñanzas de ESO, Bachillerato, y FP (Administración y Gestión, Energía y Agua y Electricidad y Electrónica).

En él contamos con un Aula del Futuro, un proyecto que se desarrolla principalmente en el 2º curso del Ciclo Formativo de Grado Superior de Administración y Finanzas.

Un aula del Futuro, ¿Por y para qué?

Nuestra máxima preocupación desde hace unos años es facilitar la máxima empleabilidad posible a nuestro alumnado. No se trata sólo de adquirir la competencia propia de un título profesional. Sabemos que hoy eso ya no es suficiente. Junto a ello, se hace necesario el máximo desarrollo de las habilidades personales y sociales, que les permitan trabajar como los denominados trabajadores del futuro, los knowmads, en términos del libro de Raquel Roca.

Por ello, lo primero que vamos a señalar es nuestro propósito: consecución de resultados de aprendizaje, pero bajo el trabajo intensivo de las soft skills.

Estamos hablando de trabajar intensamente las habilidades que se demandan para ser un ciudadano y un trabajador de hoy, del siglo XXI, a saber:

• Creatividad. Y dentro de ésta, claramente haremos referencia al trabajo proactivo, con espíritu crítico y fomentando la curiosidad.
• Comunicación, tanto verbal como escrita; tanto formal como informal, y con un manejo intenso de las TIC en todo el proceso.
• Cooperación, trabajando de forma colaborativa en equipos, con un trabajo intenso en visión, liderazgo y flexibilidad.
• Confianza, el resultado de las tres anteriores, es decir, interés, compromiso y mejora de la autoestima del alumnado.

Es precisamente este norte, el que nos obliga a aplicar nuevas metodologías, y con éstas, además, el rediseño de espacios.

La propuesta surge gracias a la iniciativa de Pablo Peñalver, docente del centro del departamento de Administración y Gestión, y es la siguiente:

La imagen ha sido generada a escala con Roomle. Posteriormente, la planta se ha retocado con Procreate, app de dibujo y retoque para Ipad.

Se plantea un aula dividida en 4 espacios fundamentalmente:

1. Espacio de creación – prototipado – presentación.

   Esta primera zona representa un espacio de trabajo configurable. Consta de 10 mesas equipadas con ruedas en la que caben 3 alumnos, por lo que podemos trabajar en óptimas condiciones 30 alumnos. Tiene además 5 tableros móviles. De esta forma, jugamos con varias configuraciones en este espacio. Podemos optar por:

   • Un espacio organizado de forma tradicional, para clases magistrales. Y también para la realización de presentaciones unidireccionales. (Imagen 1)
   • Un espacio de trabajo para trabajar creatividad, mediante la organización de mesas para grupos de trabajo. Esta misma disposición nos permite trabajar prototipado con grandes espacios, sin perjuicio de un espacio específico para albergar herramientas e material de prototipado específico. (Imagen 2)
   • Y podemos establecer una organización pensando en debates, mediante el trazado de las mesas en U. (Imagen 3)

   

   

   

2. Espacio de coworking

   Este espacio es propicio para:

   • Compartir inquietudes y recursos entre alumnos y exalumnos emprendedores. De esta forma, exalumnos que han emprendido o están e proceso, comparten con nosotros su día a día, profundizando sobre todo, en las dificultades propias de cada negocio.
   • A la vez, acceden a un servicio de mentoring con el fin de ayudarles en su proyecto. Para este paso, contamos con 2 mentores, que aportarán su experiencia en los proyectos.
   • También utilizamos esta sala para llegar a acuerdos comunes en todos los grupos de trabajo, mediante reuniones llevadas al efecto.

    

3. Espacio de investigación – compartir – publicar.

   En esta zona, contamos con equipos informáticos que nos permiten trabajar con información. Una vez que hemos delimitado el campo de trabajo de nuestro proyecto, podemos:

   • Buscar información, paso lógico dentro del proceso de investigación que hay que llevar a cabo en todo proyecto.
   • Coordinación del equipo, y gestión ágil del proyecto, mediante herramienta de gestión de proyectos con ProofHub. Y a través de diferentes herramientas colaborativas como Drive, Dropbox y otras.
   • Realización de productos intermedios con Miro.
   • Creación de contenidos a través de la gestión de un blog, que actúa como cuaderno digital. A través del portfolio digital crearemos entradas que evidencien el trabajo realizado, incluyendo texto, imágenes, infografías, vídeo, audio, presentaciones, y otros.

    

4. Espacio de grabación

   Este último espacio está dedicado a un aspecto que consideramos muy importante. Grabar en vídeo representa una síntesis de todos los aspectos trabajados en aula: tanto contenidos, como la evidencia de las habilidades que han desarrollado, es decir, creatividad, como no, la comunicación, el trabajo en equipo y por supuesto, la confianza. Grabar en vídeo hace que en un producto de 5 ó 10 minutos, tengamos constancia de gran parte del trabajo desarrollado. Por eso, es importante, y ganará en importancia.

 

 

Este esquema básico, dispone de grandes ventajas, al trabajar con espacios específicos en función de la dinámica o actividad que se desarrolla, y a decisión del propio alumnado.

Obviamente siempre es susceptible de mejora; por fin este curso contamos con paneles interactivos en los espacios principales. Para mayor conectividad recurrimos al uso de tablets que trae el propio alumnado cuando lo precisa, y se da mucha más polivalencia al trabajo desarrollado.

En cualquier caso, este planeamiento facilita mucho el trabajo de proyectos, y centrarnos en la consecución de resultados de aprendizaje, pero trabajando de forma específica las habilidades blandas, y así, preparar a nuestro alumnado para poder acceder a la vida laboral y personal de hoy, del siglo XXI.

El proceso de cambio

Como se ve en una de las imágenes, nosotros disponíamos de un aula de Administración y Gestión, compuesta por mesas y sillas fijas. Llevábamos años trabajando con metodologías ágiles, y ya se hacía necesario abordar el tema de espacios.

Lo primero que hicimos fue cambiar de aula. Por cuestiones de organización internas, cambiamos nuestra aula, por un espacio doble: 2 aulas, que antiguamente eran talleres. Tan sólo tiramos el tabique que separaba ambas, y quedó una especie de nave, que, en materia de espacios, ya nos proporcionaba mucho.

Después del tabique llegaron 2 novedades, ambas muy rudimentarias: pusimos ruedas a las mesas de Administración, y encargamos tableros móviles, de 2 metros de alto por 2 de ancho. Con esto conseguimos un aula que permitía jugar con diferentes configuraciones de forma rápida. Y los tableros permitían llevar a cabo muchas de las dinámicas propias del trabajo con metodologías ágiles.

Con este trabajo conseguimos ganar un premio en materia de innovación, y esto nos permitió dividir el aula en 4 espacios, separados por paredes de cristal. Así, solucionamos un aspecto muy importante: la libertad para trabajar en cada zona, con la exigencia de la misma; es decir, podemos estar prototipando en una zona, o exponiendo, ya a la vez, podemos estar grabando en el estudio.

Con esta estructura, hemos ido incorporando mejoras. Así, hemos podido sustituir las grandes mesas móviles artesanales, por otra más ligeras, con ruedas y abatibles, que además de permitir cambiar la configuración de la clase en segundos, pueden recogerse y no ocupar prácticamente nada. Igualmente, disponemos de sillas con ruedas que permiten jugar con todas las posibilidades que pueda imaginar.

La última incorporación han sido paneles digitales, que, al tener todo el proceso de enseñanza-aprendizaje digitalizado, nos ofrecen una agilidad total a la hora de trabajar.

El paso siguiente será profundizar en materia de prototipado, dando opciones al alumnado en materia de impresión en 3D, impresión con plotter, gafas de realidad virtual, e incluso valoramos el uso de una cortadora láser.

La importancia de la metodología

Primero llegaron las nuevas metodologías, después los recursos didácticos adaptados a estas, y por último los espacios, ya que es el elmento más costosos. Podemos decir que innovar en nuevas metodologías, y sobre todo, las de tipo activo y ágil, te lleva directamente a plantearte la necesidad del uso de nuevos espacios.

Para trabajar de esta forma, hemos realizado un gran esfuerzo y hemos profundizado en metodologías activas y ágiles: agile, design thinking, lean startup, business design, océanos azules, etc. El fondo de la cuestión es enseñar a usar las herramientas que usan empresas y emprendedores para innovar, y de esta forma, desarrollar al máximo el talento de cada alumno.

Dentro del proceso comentado, llevamos años en el que las TIC forman parte de todo lo que hacemos. Quizás fue el primer paso: asumir que podemos trabajar con un proceso totalmente digitalizado. Contamos con aulas virtuales, con todos los recursos para trabajar en el aula, en casa o en cualquier lugar. Un portfolio es el cuaderno digital del alumno, que debe llevar a cabo proyectos basados en retos reales, de forma colaborativa, con compañeros de su grupo, o de otro centro educativo. Trabajar en remoto se ha convertido en nuestro gran objetivo de este curso. El protagonismo es total por parte del alumnado. Ellos hacen todo: crean, deciden, construyen, se equivocan, debaten… En definitiva: construyen su propio aprendizaje.

Si enseñanza y aprendizaje cambian, la evaluación cambia. Si trabajas por proyectos, debes evaluar, al margen de la competencia técnica, también la competencia personal y social, o las soft skills. En este sentido, la evaluación es mucho más rica, porque no se limita a un solo instrumento. Son muchos los aspectos a valorar y en este sentido es habitual usar nubes de palabras o gráficos como forma de hacer una evaluación inicial, trabajar con herramientas de gestión de proyectos donde se pueda valorar su evaluación, desarrollar proyectos con herramientas colaborativas, usar mapas mentales o dianas de evaluación, utilizar formularios en línea; o incluso, aplicaciones gamificadas como Kahoot o Plickers.

En este contexto, y sabiendo estimular al alumnado en todo momento, sobre todo en fases iniciales, trabajamos con personas que dan el máximo porque saben que pueden darlo. Y si esto es importante siempre, lo es mucho más en Formación Profesional. De ello depende su formación, y su futuro. Y estamos en la obligación de proporcionárselo.

Para el desarrollo de este proyecto contamos con el apoyo total del equipo directivo, y del departamento de Administración y Gestión.

Nuestros proyectos

En la actualidad llevamos a cabo 2 proyectos que implican que el 100% del horario se trabaje mediante este tipo de aula:

• Proyecto de administración y Gestión, en el que los profesores de 2º de Administración y Finanzas trabajan de forma coordinada para romper los límites de los diferentes módulos profesionales. No trabajamos varios módulos profesionales, sino un proyecto que integra a todos los módulos, de forma que al alumnado pueda percibir cómo funciona una empresa, pero como un todo, no en compartimentos estancos. A este proyecto le llamamos “Una FP sin módulos profesionales”.
• Proyecto de Emprendimiento, en el que, aplicando metodologías ágiles, nos enfrentamos a un reto real, propuesto por empresa o institución, y en el que, mediante la creación de equipos multidisciplinares de nuestra clase y otros centros educativos (de Málaga y Cáceres) intentamos resolver a través del diseño y validación de un modelo de negocio. A este proyecto le llamamos FPi [FP Innovación].

Antes

Ahora